Edificio Cassará

Cómo llegar

Edificio Cassará

Un renovado mirador para contemplar los rincones más hispánicos de Buenos Aires.

A partir de su cruce con la 9 de Julio -en dirección al Congreso-, la Avenida de Mayo se puebla de cultura española. Hay un compendio de fachadas y cúpulas, construidas entre fines del siglo XIX y principios del siglo XX, de estilo ecléctico, de cuando Buenos Aires buscaba transformarse en una metrópoli. Entre los frentes con cariátides y atalantes, mansardas, balcones ornamentados y profusión de detalles decorativos, brilla el Edificio Cassará, tradicional conjunto arquitectónico con cúpula aguja, hoy destinado al desarrollo de las ciencias biológicas.

Cuando el edificio -construido en 1902- fue adquirido por la Fundación Cassará, se encontraba en un estado de abandono notable. Una renovación integral le proveyó un diseño interior y tecnología de punta que dieron lugar a cuatro niveles que se conectan de forma ágil. En el cuarto nivel, denominado Terraza Mirador, se entabla un diálogo especial con otros edificios de principios del siglo XX, todos con bellas cúpulas, molduras y arquitectura realzadas durante los últimos años, a propósito del 125º aniversario de la Avenida, que se celebra el año próximo. Al llegar al Mirador, el Cassará subyuga: su cúpula mantiene regularidad morfológica en relación al tejido y la trama urbana de la Avenida.

La cuadra da cuenta, también, de otros tesoros que, desde el Mirador, son palpables: el Hotel Castelar (al 1152), obra del arquitecto Mario Palanti; el café Iberia (al 1196), reconocido por la Legislatura municipal como “Esquina de la Hispanidad”; un palacete –de la mano de enfrente- que data de 1895 y en cuyos salones funcionó la sede de la Unión Industrial Argentina (al 1147); y, un poco más allá, el edificio del antiguo Hotel Metropole, hoy Hotel Cecil, todas muestras privilegiadas de arquitectura construida por una generación de procedencia y formación extranjeras que marcó a la Ciudad durante aquel cambio de siglo.